Día Mundial de la Salud Mental: 5 consejos para afrontar la ansiedad
11 Octubre, 2025
Salud en Casa .– Según información de EsSalud, en lo que va del año se han atendido más de 50,000 personas por cuadros de ansiedad. A diferencia del estrés, que aparece como una respuesta natural ante situaciones de presión específicas, la ansiedad se caracteriza por una preocupación permanente y anticipatoria, que puede mantenerse incluso cuando el motivo inicial ya no está presente.
“El estrés sostenido y/o mal gestionado aumenta el riesgo de experimentar episodios de ansiedad, afectando la salud física, la vida personal y el rendimiento laboral. Las personas que lo padecen tienden a sobrepensar, imaginar escenarios catastróficos y experimentar síntomas como opresión en el pecho, nudo en la garganta, temblores, adormecimiento, calambres, dificultad para respirar, palpitaciones e incluso la sensación de estar sufriendo un infarto”, explica Laura Campos, Psicóloga del Centro Médico de La Positiva Seguros.
En el marco del Día Mundial de la Salud Mental, esta fecha nos invita a reflexionar sobre la importancia de cuidar nuestro bienestar emocional y reconocer los signos de alerta que muchas veces pasamos por alto. En ese sentido, el especialista comparte cinco recomendaciones prácticas para manejar la ansiedad en el día a día. Estas acciones, si bien no reemplazan la atención profesional, pueden convertirse en un primer paso para fortalecer nuestra salud mental y promover una vida más equilibrada y consciente.

- Identifica los detonantes: Empieza por conocerte. Registra durante una semana los momentos en que sientas más tensión; eso te ayudará a descubrir patrones. Si sabes que el tráfico matutino o las reuniones extensas te generan malestar, podrás anticipar tus reacciones y planificar estrategias de afrontamiento, como escuchar música relajante o practicar respiración consciente antes de entrar a una reunión.
- Practica “journaling”: La escritura es una herramienta eficaz para organizar y liberar preocupaciones. Dedica unos minutos al día a plasmar en un cuaderno lo que piensas y sientes: desde miedos y pensamientos recurrentes hasta logros y agradecimientos. Este ejercicio te ayuda a tomar distancia de las ideas negativas, darles perspectiva y reducir su intensidad.
- Reestructura pensamientos automáticos: La ansiedad suele alimentarse de pensamientos catastróficos repetitivos (“no voy a poder”, “todo saldrá mal”). Un ejercicio útil es escribirlas y cuestionarlas con preguntas simples: ¿qué evidencias tengo de que esto es cierto? ¿qué otra interpretación podría darle? Esta práctica, conocida como reestructuración cognitiva, ayuda a reducir la intensidad emocional, facilitando una vida cotidiana más saludable.
- Fortalece tus redes de apoyo: Contar con un círculo de confianza funciona como un amortiguador emocional. Conversar con familiares, amigos o grupos de interés no solo ayuda a compartir preocupaciones, sino que también ofrece nuevas perspectivas. Programa encuentros semanales, incluso virtuales, para disminuir la sensación de aislamiento y reforzar tu bienestar.
- Gestiona tu entorno: El desorden visual genera estímulos que incrementan la ansiedad sin que lo notes. Mantén tu espacio de trabajo y descanso organizados, con buena ventilación e iluminación natural, para generar una sensación de control y calma. Incluso dedicar diez minutos diarios al orden puede tener un efecto positivo en tu mente.